La publicidad siempre ha estado ausente en los libros de papel. A lo sumo en encontramos algún encarte de la misma editorial y poco más. Hace tiempo que se especula con la posibilidad de insertar publicidad en el libro digital y, una vez más, Amazon parece haber encontrado una solución que puede beneficiar a todos: al lector, al anunciante, a la editorial y a sí mismos.
Amazon pone a la venta el Kindle más barato a precio rebajado a cambio que el comprador acepte publicidad (ver oferta en Amazon.com). El ahorro es de alrededor de 25 dólares y deja el precio en 114 dólares, 80 euros al cambio. Este empieza a ser un precio barato. Si Amazon ya reventó los precios al fijar el Kindle básico a 139 dólares, esta oferta lo hace casi irresistible.
Amazon explota la ventaja de estar en el centro del mercado y esta vez propone algo que puede beneficiar todos los actores del libro digital por igual:
Usuario: si no le importa ver aparecer publicidad no invasiva en la parte baja de la pantalla de Kindle, dispone de un dispositivo más barato.
Anunciante: accede a un público altamente segmentado, cuyos gustos son deducibles a partir de su historial de compra, sean libros o todo lo demás que vende Amazon. Eso lleva a un retorno por impacto más alto, ergo en una inversión publicitaria más eficiente.
Editorial: por extraño que parezca, la editorial también se ve indirectamente beneficiada, siempre y cuando haya accedido y se haya creído el nuevo paradigma –y si está vendiendo en Amazon es que se lo ha creído. Más Kindle vendidos son más libros digitales vendidos. Es simple.
Amazon: consigue vender más Kindle y amortizar todavía más una inversión que, a tenor de la reciente bajada de precios, ya debe estarlo bastante. Esos Kindle vendidos de más generan más ventas de su catálogo de libros.
Podrá objetarse que el precio es barato siempre que lo pongamos en relación con otros precios. Es rigurosamente cierto. Una mierda pinchada en un palo a 80 euros es muy cara. Si digo que es barato es porque:
a/ El resto de precios del mercado de eReader invita a llorar y partirse de risa a partes iguales.
b/ La calidad y prestaciones del resto de eReader produce sensaciones similares a las descritas en el punto a.
c/ El DRM de Amazon/Kindle es imperceptible, muy diferente al de los basados en Adobe Digital Editions. Eso permite una experiencia de compra mejor que la de una librería.
d/ Si uno lee medianamente bien en inglés, la oferta de títulos en Amazon en dicha lengua es, literalmente, insuperable. Incluso los precios son, en general, más baratos que en otras lenguas y en otros distribuidores.
e/ 80 euros es el precio equivalente a entre dos y cuatro novedades de papel en tapa dura. En rústica podríamos alcanzar los seis u ocho libros. En cualquier caso está dentro del consumo anual del lector medio.
f/ la publicidad será no invasiva –no interrumpirá la lectura- y posiblemente seguirá el ritmo del paso de página –aunque técnicamente podría ir más rápido. También habrá salva-pantallas con publicidad. Parece una publicidad respetuosa con el usuario.
Como argumento final: aunque me pongáis ante las narices otro eReader a 80 euros, me seguiré quedando con Kindle, por todo lo que Amazon tiene detrás. Incluso si me ofrecieran un eReader de otra marca a 40 euros me seguiría quedando con el Kindle. Si quiero leer sin publicidad todavía podré gastarme 100 euros (139 dólares) y seguirá siendo una muy buena compra.
La partida está llegando a su fin en cuanto al precio de los eReaders básicos, el problema para muchos competidores es que todavía doblan el precio del Kindle básico sin ofrecer a cambio ni la mitad de prestaciones. Han cantado línea, seguimos para bingo. Y tienen casi todos los cartones. Poco tiempo pasará hasta ver un Kindle al precio de una edición de best-seller en tapa dura. La partida habrá terminado.
P.D: me ha salido un panfleto pro-Amazon, pero es que es difícil encontrarle pegas a algo tan evidentemente bueno desde el punto de vista del usuario.
Quiero aclarar cómo saldrá la publicidad dentro del Kindle. Cito de la nota de prensa: Kindle special offers and sponsored screensavers display on the Kindle screensaver and on the bottom of the home screen. O sea, nada de publicidad dentro del libro, ni mientras estás leyendo un libro, ni cuando pasas página, ni nada de eso. Anuncios en los salvapantallas y en la página de inicio. Punto.
Hecha esta aclaración, me parece correcto que haya un modelo con publicidad siempre que den a elegir. No me gustaría que en un futuro te hagan comprar la versión con publicidad porque la otra es demasiado cara, o que retiren la versión sin publi porque, según sus estudios, no tiene demanda. Ya veremos.
Cierto Jordi, mi mención a la inserción de publicidad en medio de la lectura ha sido un error al interpretar mal la expresión “…and on the bottom of the home screen…” en la que me he pasado la “home” por el arco del triunfo, entendiendo que iban apareciendo en el margen inferior sin invadir la página propiamente dicha. Está claro que dentro del libro no hay ni debe haber, pues no la inserta el editor, sino Amazon.
Coincido contigo en la bondad del modelo siempre y cuando se pueda elegir. Si al final me obligan a ver publicidad sin ventaja añadida alguna, se habrá caído en un abuso.